A simple vista

Esta especie, que se encuentra muy expandida en México, ingresa a Estados Unidos por dos áreas: una gran parte del sur de Arizona que linda con Nuevo México y la zona del Parque Nacional Big Bend en Texas. Estas dos poblaciones no tienen una relación cercana en México y son diferentes en varios aspectos, como el color de los huevos, el color del pico de las crías, el sonido y las prácticas de nidificación. En Arizona, los hábitos de nidificación son sorpresivamente complicados, ya que diferentes miembros de la bandada participan, en mayor o menor medida, en varios intentos de nidificación a la vez.
Categoría
Crows, Magpies, Jays, Perching Birds
Conservación
Baja preocupación
Hábitat
Arroyos and Canyons, Forests and Woodlands
Región
Southwest, Texas
Comportamiento
Flap/Glide, Undulating
Población
430.000

Rango e identificación

Mapa de migración y distribución

Casi nunca se aleja de su territorio inmediato de reproducción: es una de las especies de aves más sedentarias de América del Norte.

Descripción

Nesting territories of Mexican Jays are small and adjacent; when a predator approaches, an entire colony moves to the defense, scolding loudly from a safe distance. Acorns are their staple diet, but they also glean insects and rob eggs and young from nests.

Tamaño
About the size of a Crow, About the size of a Robin
Color
Black, Blue, Gray, Yellow
Forma de alas
Broad, Long, Rounded
Forma de cola
Long, Rounded, Wedge-shaped

Cantos y llamadas

Patrón de canto
Flat, Rising, Simple

Hábitat

Bosques abiertos de roble (Arizona); bosques de roble y pino (Texas). En Arizona, se encuentra en diferentes bosques de roble y en cuestas más bajas de montañas (hasta a unos 2.000 metros de altura). En los demás lugares de su zona de distribución, en Texas y México, se encuentra en bosques diversos con abundantes pinos y robles.

Comportamiento

Huevos

4 o 5, a veces entre 1 y 6. En Arizona, los huevos son de color verde pálido y sin manchas. En Texas, son de color verde azulado pálido, generalmente con machas parduscas. La incubación la realiza solo la hembra, y dura unos 18 días. Los demás adultos de la bandada alimentan a la hembra mientras está incubando.

Cría

Las crías son alimentadas por ambos padres y otros miembros de la bandada. Las crías abandonan el nido a los 25 o 28 días de vida, pero pueden ser alimentadas durante varias semanas más.

Comportamiento alimentario

Busca alimento en la tierra y en árboles, generalmente en bandadas. Puede frecuentar flores grandes en verano para libar néctar y comer insectos. Casi nunca atrapa insectos en vuelo. Sujeta las bellotas contra una rama con las patas y las golpea con el pico para abrirlas. Recoge bellotas en otoño y las entierra para comerlas luego.

Dieta

Omnívoros; comen principalmente bellotas, semillas e insectos. Desde el otoño hasta el invierno, la dieta está compuesta mayormente por bellotas y semillas de pinos piñoneros, y por insectos en el verano. También come saltamontes, escarabajos y orugas, entre otros insectos, lagartijas, serpientes pequeñas, huevos de aves, ratones y aves.

Nidificación

Las bandadas defienden los territorios permanentes, los cuales se mantienen de generación en generación. En cada bandada, de 2 a 4 hembras pueden nidificar a la vez. A cada hembra la cuida un macho, pero también puede aparearse con otros machos de la bandada. En Texas, donde las bandadas son más pequeñas, pueden hacer nidos en parejas aisladas. Nido: Hace nidos de modo tal que queden bien ocultos entre el follaje de árboles, usualmente en robles, juníperos o pinos. Los nidos se encuentran a unos 6 metros de altura, y pueden estar de 2 a 18 metros por encima del suelo. El nido (construido por ambos padres) es una copa voluminosa hecha con palitos y ramas pequeñas, y está recubierto con raicillas finas y fibras vegetales.

Vulnerabilidad

Estado de conservación

Aún es común dentro de su zona de distribución en Estados Unidos y no presenta tendencias poblacionales evidentes.

Mapa climático

Los científicos de Audubon han utilizado 140 millones de observaciones de aves y modelos climáticos sofisticados para proyectar cómo el cambio climático afectará la zona de distribución de esta ave en el futuro. Obtenga aún más información en nuestro proyecto Sobrevivir Por Unos Grados.

Amenazas climáticas que enfrenta el Chara Pecho Gris

Elija un escenario de temperatura a continuación para ver qué amenazas afectarán a esta especie de ave a medida que aumente el calentamiento global. Las mismas amenazas impulsadas por el cambio climático que ponen en riesgo a las aves afectarán también a otras especies de vida silvestre y a las personas.

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