Colaboración y conservación: ¿cómo avanza la ENCA en Chile?

El tiempo vuela. A principios de este 2024 celebramos dos años de la oficialización de la Estrategia Nacional de Conservación de Aves en Chile (ENCAChile). Junto a otras 24 instituciones, Audubon ha colaborado con su visión estratégica, financiamiento y experiencia a la implementación de la ENCA, que hoy ya evidencia resultados.
Moustached Turca (Pteroptochos megapodius)

En enero pasado celebramos dos años de la oficialización del Plan de Acción para la Conservación de Aves, una plataforma inédita de colaboración compuesta por ocho servicios públicos, ocho ONG y nueve centros de investigación, que apunta a fortalecer la conservación de las aves y sus hábitats en el país.

Junto a estas 24 instituciones, Audubon ha colaborado con su visión estratégica, financiamiento y experiencia como integrante del Consejo Directivo, del Grupo de Trabajo de Políticas Públicas y como facilitador del Grupo de Trabajo de Financiamiento. Además, junto al Ministerio del Medio Ambiente, está coordinando la elaboración de Planes de Acción para la Conservación de Aves Marinas y de Humedales, e integra el grupo impulsor del Plan de Acción para la Conservación de Aves Playeras [1].

La Estrategia Nacional de Conservación de Aves en Chile (ENCAChile) ha tenido notables avances en estos dos años. Además de oficializar esta plataforma de colaboración interinstitucional (el comité de implementación), se ha creado un programa nacional de monitoreo de aves, se han identificado y priorizado sitios de importancia para las aves marinas y costeras, se está apoyando decididamente la incorporación de las aves con mayores amenazas a la evaluación de su estado de conservación. También se han realizado informes con observaciones y sugerencias para el desarrollo sustentable de la energía eólica en Chile, análisis de vacíos y oportunidades para fortalecer las políticas públicas, un plan financiero, análisis de mercado del aviturismo en Chile, de oficialización del plan de acción para la conservación de aves playeras de Chile, entre muchos otros.

Con un fuerte compromiso en potenciar el aviturismo en el país, y alineado con la meta de la ENCAChile en fortalecer este rubro[2], uno de los grandes aportes de Audubon a la implementación de la Estrategia fue el financiamiento y desarrollo del primer análisis de mercado del aviturismo en el país, junto a Consultorías Fernweh. Gracias a este análisis fue posible dimensionar este mercado en Chile, las ventajas comparativas que tiene el país y perfilar a los avistadores chilenos y extranjeros, acorde a sus preferencias, periodicidad de viajes y presupuesto. Así, hoy sabemos, por ejemplo, que en Chile el mercado especializado de aviturismo genera $62,6 millones de dólares al año y que el aviturista extranjero, en promedio, gasta individualmente 6,5 veces más de lo que gasta el turista foráneo promedio.

Consistentemente, y ampliando su impacto a comunidades locales, Audubon está desarrollando el Curso de Formación para Guías Naturalistas de Aviturismo, realizado junto a Fundación Legado Chile, Birds Chile y la ROC. Esta instancia busca formar 31 guías naturalistas en tres regiones -Valparaíso, Bíobío y La Araucanía-, contribuyendo a conservar el patrimonio biocultural y promover el desarrollo económico local.

Audubon también lidera el Grupo de Trabajo de Financiamiento, encargado de estimar la inversión en implementación y determinar mecanismos de financiamiento para la ENCAChile. Este análisis y el plan financiero[3] dieron cuenta de un hallazgo clave: la Estrategia tiene una relación costo-beneficio muy positiva. Es decir, con una inversión relativamente baja para su total implementación, se logran grandes beneficios. Además, será sumamente beneficiosa para la conservación no solo de aves, sino también de la biodiversidad en el país.

En estos dos años de implementación, el trabajo de Audubon junto a otras instituciones también permitió la generación de dos documentos importantes que apuntan a fortalecer la conservación de aves en el territorio nacional. El primero de estos es el Análisis de Vacío de Políticas Públicas, que buscó visualizar oportunidades para la implementación de 15 acciones relacionadas con el fortalecimiento de políticas públicas de la ENCAChile [4] (por ejemplo, incorporar la Estrategia, las aves y sus hábitats en la Evaluación Ambiental Estratégica de los Instrumentos de Planificación Territorial). De esta manera, se visualizó una oportunidad en la creación de los reglamentos del nuevo Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, para integrar la Estrategia y sus acciones en el marco regulatorio.

El segundo documento es el Análisis Espacial para identificar Sitios Claves de Biodiversidad (KBA) de Aves Playeras y Marinas en Chile, donde se identificaron 245 de estos sitios en el país. Este análisis y documento es un enorme avance e insumo para una de las acciones más importantes de la estrategia[5]: identificar y priorizar sitios de importancia para las aves en Chile.

La elaboración e implementación de la ENCAChile tiene un fuerte foco participativo. En su elaboración participaron más de 2.200 personas, en su implementación ya se han incorporado activa y directamente 65 personas, el lanzamiento del comité contó con la presencia de más de 60 personas, las salidas de capacitación de guías locales en aviturismo cuentan con la participación de más de 40 personas, y se han desarrollado talleres macrozonales en el marco del trabajo con aves playeras y marinas, en donde han participado más de 200 personas.

Audubon también lidera el Grupo de Trabajo de Financiamiento, encargado de estimar la inversión en implementación y determinar mecanismos de financiamiento para la ENCA. Este análisis y el plan financiero[3] dieron cuenta de un hallazgo clave: la Estrategia tiene una relación costo-beneficio muy positiva. Es decir, invertir en la implementación de esta estrategia es conveniente, y será sumamente beneficioso para la conservación no solo de aves, sino también de la biodiversidad en el país.

En estos dos años de implementación, el trabajo de Audubon junto a otras instituciones también permitió la generación de dos documentos importantes que apuntan a fortalecer la conservación de aves en el territorio nacional. El primero de estos es el Análisis de Vacío de Políticas Públicas, que buscó visualizar oportunidades para la implementación de 15 acciones relacionadas con el fortalecimiento de políticas públicas de la ENCAChile[4] (por ejemplo, incorporar la Estrategia, las aves y sus hábitats en la Evaluación Ambiental Estratégica de los Instrumentos de Planificación Territorial). De esta manera, se visualizó una oportunidad en la creación de los reglamentos del nuevo Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, para integrar la Estrategia y sus acciones en el marco regulatorio.

El segundo documento es el Análisis Espacial para identificar Sitios Claves de Biodiversidad (KBA) de Aves Playeras y Marinas en Chile, donde se identificaron 245 de estos sitios en el país. Este análisis y documento es un enorme avance e insumo para una de las acciones más importantes de la estrategia[5]: identificar y priorizar sitios de importancia para las aves en Chile.

La elaboración e implementación de la ENCAChile tiene un fuerte foco participativo. En su elaboración participaron más de 2.200 personas, en su implementación ya se han incorporado activa y directamente 65 personas, el lanzamiento del comité contó con la presencia de más de 60 personas, las salidas de capacitación de guías locales en aviturismo cuentan con la participación de más de 40 personas, y se han desarrollado talleres macrozonales en el marco del trabajo con aves playeras y marinas, en donde han participado más de 200 personas.

De esta manera, en su implementación la Estrategia integra transversalmente el bienestar humano. Lo anterior, porque tenemos la convicción de que la conservación de biodiversidad y el desarrollo no son opuestos. Por el contrario, estos tienen un camino común donde los ecosistemas naturales son fundamentales para alcanzar un desarrollo sustentable.

Creemos firmemente que, al promover la conservación de las aves y sus hábitats, estamos protegiendo a las presentes y futuras generaciones. Audubon celebra estos avances y espera continuar fortaleciendo esta gran alianza junto a ONG, organizaciones públicas, y centros de investigación.
 


[1]  Acción 17 de la Estrategia de Aves: Elaborar planes de acción para grupos de aves que requieran gestión y planificación sitio-específicas.
[2]  Acción 14 de la Estrategia de Aves: Potenciar el aviturismo en Chile.
[3]   Acción 15 de la Estrategia de Aves: Desarrollar un plan financiero y de negocios para la Estrategia
[4]   Acciones de la Estrategia de Aves: 8-10; 33-44.
[5]   Acción 1 de la Estrategia de Aves: determinar y priorizar sitios de importancia para estas especies en Chile.