Cómo aumentar su conciencia plena y empatía con el avistaje de aves

Cambiar su enfoque a la naturaleza y la vida silvestre puede ayudar a calmar el estrés y la ansiedad. Pero siempre asegúrese de que los demás también se sientan cómodos.

Nota del editor: Estos consejos son parte de “El antídoto de la naturaleza”, un paquete de la edición de invierno de 2019 de la revista de Audubon. Lea más del artículo aquí

Conectado con las aves, desconectado de todo lo demás

La conciencia plena, la práctica de estar en el momento, puede mejorar nuestra conexión con la naturaleza y el sentido de bienestar. Pruébela en grupo, ya sea en las populares sesiones de “baño de bosque” estilo japonés o en una meditación guiada en una reserva natural o por su cuenta. Para comenzar, pueden ser útiles estos consejos de Becky Cushing de Mass Audubon, quien dirige talleres de avistaje de aves y conciencia plena en un popular sitio de retiro de bienestar de Nueva Inglaterra y en santuario de vida silvestre locales.

Concéntrese. No lleve binoculares ni una lista de verificación. Busque un lugar donde estar parado o sentado con los ojos cerrados. Tómese cinco minutos para sentir el lugar a través de los sentidos que no sean la vista.

Use su “mente de principiante”. Cuando salga a caminar, deje a un lado cualquier expectativa de lo que podría ver y viva la experiencia como si fuera su primera vez.

Pruebe meditar mientras camina. Muévase sigilosamente, sálgase de su propia cabeza pensando en formas en las que la fauna autóctona podría detectarlo. Conecte su conciencia sobre la vida silvestre con la conciencia de la vida silvestre sobre usted.

Ajuste su audición. Llévese las manos a las orejas a modo de escuchar mejor y trata de identificar la ubicación, dirección y distancia de los sonidos. O deje que el coro del amanecer lo invada: Escúchelo como si fuera una sinfonía en lugar de instrumentos individuales.

Acompañe a sus compañeros de caminata, y así podrán caminar más fácilmente

No todos se sienten seguros y cómodos en la naturaleza. Las personas que no acamparon de niños o que no se imaginan a sí mismos haciendo senderismo podrían sentir estrés o ansiedad. Para hacer que las áreas verdes sean más atractivas para todos, comience por evaluar sus propias acciones y seguir este consejo del fundador de Latino Outdoors José G. González.

Haga su tarea. Tome la forma en que usted aborda el aire libre con interés y curiosidad y aplíquela a entender las barreras que enfrentan las personas de grupos marginados o tradicionalmente subrepresentados.

Considere el impacto no intencional de sus palabras. Si pregunta de dónde es alguien, por ejemplo, su intención podría ser: “¿Vive por aquí?”. Pero la persona podría escuchar: “¿Es usted estadounidense?”.

Tenga cuidado con la arrogancia de la experiencia. Trate de ser útil, pero no aleccione ni simplemente imparta su conocimiento a personas que parezcan nuevas. Es posible, por ejemplo, que no tengan la ropa “apropiada”, pero no suponga que son una hoja en blanco.

Respete los grupos con los que se topa. Unirse a otros puede ayudar a las personas a formar un hábito por la naturaleza, al mismo tiempo que facilita el camino para quienes se sienten ansiosos o inseguros solos. Reconozca y dé la bienvenida al desarrollo en comunidad que está ocurriendo.